3 huevos
250 g de azúcar
300 g de harina
¼ litro de aceite (1 vaso de agua)
1/8 litro de leche (1/2 vaso de agua)
2 cucharadas pequeñas de levadura Royal
Ralladura de limón
Se baten tres claras de huevo a punto de nieve, con un pellizco de sal.
En un bol aparte se mezclan las yemas, el azúcar, el aceite, la leche y
la harina tamizada junto con la levadura, al final. A esta mezcla se añaden las
claras a punto de nieve despacito para que no se bajen, con cuidado y de forma
envolvente.
Cuando está todo mezclado se añade la ralladura de limón.
Se mete en el horno ya caliente a 200º C, en un molde engrasado y
durante ¾ de hora o una hora. Cuando haya pasado el tiempo pinchar para
confirmar si está hecho (acordaros de que si la aguja está seca es que está
bien hecho).
No abrir el horno mientras se hace para no cambiar el ritmo del
bizcocho.
Cuando lo probéis os daréis cuenta de que es como las magdalenas, así
que, si cambiáis de molde os salen magdalenas.
¡Está riquísimo!
¡Está riquísimo!
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