Maylex es un "bistrot" que está en la calle Provenza 243 de Barcelona. El sitio es chulo, la terraza es tranquilita (en aquella zona no hay mucho lio) pero es caro para lo que, realmente, comes. Lamentablemente le ponemos la coletilla de restaurante "psé".
Lo mejor que comimos fue los huevos escalfados sobre parmantier de patatas y migas de pan .También el salmón estaba bueno (en crosta de Wasaby sobre su crema).
Los mil hojas de verduras gratinadas estaban un pelín crudos (¿al dente?), y la hamburguesa (Burguer casera con cebollas caramelizadas) estaba bastante cruda (para alguien que la pide al punto) y muy fuerte de sabor. La carne era buena, pero le pusieron alguna salsa y se les fue la mano.
Así que, en un petición poco arriesgada, no dimos en el blanco.
La presentación de los platos está muy bien: pizarra para carnes y pescados y blanco radiante para los huevos.
Lo que más nos gustó: el servicio. Muy entregados, muy encantadores. Un gusto.
Lo que menos el precio. Los segundos valían unos 15 euros... y, la verdad, una hamburguesa con patatas no los vale. Es caro, nos costó casi 50 € primero, segundo, mojito de postre y botella de vino entre cuatro.
http://www.maylex.es/
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